“Un punto de inflexión, te diría determinante, para nuestro basquetbol”

En el marco de la Gala de los 100 años de la Federación cordobesa de básquet en el estadio Kempes, la leyenda mundial de la pelota naranja Ruben Magnano, accedió a dialogar brevemente con el portal El observador.

Foto Rubén Magnano

En primer lugar, habló acerca de cómo estaba viviendo el centenario de la Federación cordobesa de básquet en el estadio Kempes, siendo un momento y lugar repleto de dirigentes, autoridades, jugadores, entrenadores que asistieron a la Gala.

En segundo lugar, comentó sus sensaciones al cumplirse 20 años de la Generación Dorada que obtuvo la medalla de oro en Atenas 2004 siendo un hecho histórico mundial porque derrotaron a USA con jugadores NBA de la talla de LeBron James por ejemplo. Además, agregó que fue muy emotivo porque se pudo desarrollar tanto con el público como así con sus familiares.

Finalmente, dio a conocer como fue liderar ese equipo que tenía en la mente un objetivo y lo pudo concretar. “Un hecho que dejó un legado muy interesante” subrayó el entrenador respetado por todo el mundo.

Todo empezó…

1)    Bueno, acá estoy con una leyenda mundial del básquet, para mí es un honor entrevistarte otra vez. ¿Cómo te va?

¡Hola! ¡Muy buenas noches! ¡Muy bien! La verdad que pasando un momento muy grato.

2)    Bueno, se cumplieron 20 años de la Generación Dorada. ¿Cómo viviste ese momento?

Fue extremadamente emotivo. El gran título es que todos nosotros vivimos un gran abrazo de gratitud por parte de toda la gente. Por parte del basquetbol.

Momento muy emotivo. Qué la mayoría de nosotros, incluso compartió, no solamente con el público sino con sus familiares, ¿no?

3)    ¿Cómo era liderar ese equipo de monstros? Porque lo que hicieron fue histórico a nivel mundial.

Si, fue realmente muy muy importante para mi vida como entrenador. Un punto de inflexión, te diría determinante, para nuestro basquetbol. Un hecho que dejó un legado muy interesante.

O sea, que ojalá se pueda repetir.

Bueno, muchas gracias y para mi es un honor

Bueno, hasta siempre, chau.