En el marco de la previa al derby Instituto-Belgrano por la 22° fecha de la Liga Profesional 2023, el ex jugador de ambos clubes Darío Alaniz-hoy técnico en Gimnasia y Esgrima de Mendoza-, accedió a dialogar extensamente con el portal El Observador.
Foto Club Instituto
En primer lugar, habló acerca de cómo fue su fichaje en Belgrano como así sus recuerdos en el celeste, además marcó lo mismo de su paso por La Gloria del Jota Jota López que lo trajo a la ciudad desde San Martín de Tucumán. Precisamente en Alta Córdoba subrayó que vivió sus momentos más felices y a la vez de tristeza .En tanto y en cuanto, del Pirata recordó el apoyo permanente de la gente hasta incluso en la actualidad permanece en contacto con allegados a la institución al que considera amigos .Antes de su fichaje, estuvo cerca de cerrar en Quilmes, pero no se dio por un tema de inseguridad de su esposa reveló el también ex Talleres.
En segundo lugar, comentó que jugó el derby tanto para Instituto como para Belgrano. En La Gloria lo hizo en la Primera División, que al igual que sucede ahora, contaba con los tres cuadros de Córdoba en la “A”. Por el lado celeste, defendió los colores en la B Nacional contra Instituto.”Fue una experiencia difícil de olvidar” señaló el habilidoso volante de la década 2000. En materia comparaciones, cuando se le buscó una semejanza con la actualidad, prefirió no marcar a nadie puntual. Disfrutó y vivió su época de la mejor manera.
Finalmente, dio a conocer sus proyectos 2023, donde siempre tratará de mejorar para ser el mejor profesional posible para asi contribuir al mundo del fútbol desde su evolución constante por aprender.
Todo empezó…
1) ¿Cómo fue tu fichaje en Belgrano? ¿Qué recordas del Pirata?
Bueno, mi época en Belgrano el fichaje fue… (Piensa) me inscribió cablegráficamente, yo había terminado mi vínculo con Argentinos Juniors, y estaba en una situación donde casi estaba arreglado con Quilmes. Pero bueno, surgió un problema de inseguridad con mi familia. Sobre todo mi esposa, y bueno, tomamos la determinación de venir a Córdoba antes de quedarnos en Buenos Aires.
Y, bueno… (Piensa) mis recuerdos son al margen de todos los inconvenientes que en su momento había en Belgrano desde lo económico, institucional, que fue una época complicada. Pero tengo muy buenos recuerdos .La gente, el acompañamiento permanentemente, siempre al pie del cañón. Como los caracteriza a la gente de Belgrano.
Así que, tengo mis buenos recuerdos. De hecho, todavía tengo gente amigo desde ahí. Gente con la cual todavía estoy vinculado. Tenemos una amistad a la distancia, que nos seguimos charlando por supuesto.
2) ¿Cómo fue tu fichaje en Instituto? ¿Qué recuerda de La Gloria?
Y mi fichaje con Instituto fue, en realidad, cuando me anota Jota Jota López y ya había un acercamiento seis meses antes. Una vez que yo había terminado el torneo apertura en San Martín de Tucumán .Instituto me quiso traer, pero bueno, no se llegó a concretar.
Y me trajo a la temporada siguiente. La verdad que llegué diez o doce días antes junto a Hernán Buján, siempre lo recuerdo. Desde ese momento nos hicimos amigos.
Llegué prácticamente sin conocer a nadie, y con compañeros nuevos. Y la verdad que me encontré con algo muy lindo.
Yo siempre lo recalco: Instituto fue mi mayor alegría futbolística y mi peor tristeza futbolística .Así que… (Piensa) pero tengo mis mejores recuerdos por supuesto.
Un cariño incondicional por el cual siempre voy a estar agradecido a la institución.
Foto Club Belgrano
3) Jugaste en Belgrano e Instituto, ¿Qué te genera este enfrentamiento en Primera División?
En los dos, en Instituto y en Belgrano, justamente, creo que jugué dos clásicos. Uno en Primera y otro en la B Nacional. En B Nacional jugué para Belgrano y en Primera jugué para Instituto.
Y, bueno, creo que esa temporada en Primera División es igual a la temporada de ahora, a la actual, estaban los tres equipos en Primera División.
Y la verdad que una alegría enorme. Una satisfacción poder vivir eso. Con la pasión que lo vive el cordobés.
Y la verdad que fue una experiencia muy muy linda. Difícil de olvidar.
Y recuerdo cada partido, por supuesto.
4) ¿Quién sería el Darío Alaníz de esta época? Por ejemplo Cristian Pino se comparo con Rodrigo Garro.
No, no, a mi no me gusta la comparaciones.
Yo creo que sería muy difícil porque nuestra época fue distinta. Ahora hay mucha dinámica, velocidad, fuerza. Es mucho más físico que futbolístico. Así que, por ahí, las comparaciones mucho no me gustan.
Pero si me tengo que quedar con algo, me quedo con lo que pude desplegar en el campo de juego en cada momento y en cada situación. De mi momento más que nada.
5) ¿Qué proyectos tiene para el 2023?
Mis proyectos, mira… (Piensa).Mira, yo no creo en los proyectos. Y más en el fútbol argentino. Esa es la realidad. Hoy se vive de un resultado lamentablemente.
Y dolorosamente te lo cuento. Pero, a nivel personal seguir creciendo. Hoy trabajo en el club Gimnasia y Esgrima de Mendoza. Dirijo la primera local, y siempre por supuesto con la esperanza de poder dirigir más arriba. Trabajo. En mi cabeza está permanentemente ser lo más profesional posible.
Y crecer. Después Dios dirá si tengo la posibilidad o no, pero no lo tengo como proyecto. Lo tengo el vivir el día a día. Porque te vuelvo a reiterar: no creo en los proyectos futbolísticos, sobre todo, en este país.
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