En el libro Dream Team, narran el momento que los jugadores de la selección de Cuba, le pidieron la foto a los jugadores de la NBA.
Foto Dream Team USA
Así lo explican:
"Los cubanos no eran más que un grupo de hombres que se dieron cuenta de que estaban viviendo algo único, deportistas que nunca jugarían en la NBA, ni si quiera en Europa, pero que un día entrarían en su sala de estar, señalarían una foto colgada en la pared y dirían a sus nietos: Mirá, es tu abuelo, con Michael Jordan.
Los Estados Unidos ganaron 136 a 57, lo que pareció indicar que tal vez la presencia de los profesionales en las Olímpiadas generaría duelos aun más descompensados de lo que se había creído. Miré al inspector de carne sentado en un lado de la pista y me pregunté si las palabras de Oscar Wilde le habrían pasado por la cabeza: Cuando los dioses quieren castigarnos, atienden nuestras plegarias.
La reacción de los derrotas, que acabaría repitiéndose tras los siguientes partidos, la resumió Miguel Calderón, el entrenador de las sobrepasadas victimas: "Para nosotros, ha sido un partido elegante, un partido histórico. Regresamos a Cuba con una fotografía hermosa con ellos. "
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